Frankenstein. Notas y bibliografía consultada

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Notas:

(1) Calificativos con los que William Godwin se dirigía su hija.

(2) La familia Godwin regentaba la Librería Juvenil Godwin, situada en el 4 de Skinner Street.

 (8) Mary Godwin se refiere al experimento realizado por  Giovanni Aldini, alumno de Galvani, el 17 de enero de 1803 en Londres, en el cuerpo ajusticiado del asesino George Forster  y descrito en una concurrida conferencia publica :  «…las mandíbulas se contrajeron, los músculos de la cara quedaron horriblemente contorsionados y uno de sus ojos se abrió…»

(4) Es la frase con la que comienza Vidas de los Nigromantes, publicado por William Godwin en 1834.

(5) «The horrors of the Oakendale Abbey» fue publicada en 1797 por la editorial sensacionalista Minerva Press. Firmada por una enigmática Mrs. Carver, posible seudónimo que Don Shelton atribuye al anatomista y cirujano sir Anthony Carlisle.

(6) La Murder Act de 1751 permitió que los cuerpos de los criminales ejecutados fuera conducidos a “La Compañía de Cirujanos”, convertida en 1800 en el Real Colegio de Cirujanos (Royal College of Surgeons) para realizar experimentos de disección anatómica.

(7) En Frankenstein, la Criatura encuentra en una bolsa de cuero varios libros, entre ellos El paraíso perdido, de John Milton y lo lee.  «…El paraíso perdido despertó en mí emociones distintas y mucho más profundas. Lo leí, al igual que los libros anteriores que había encontrado, como si fuera una historia real. Conmovió en mí todos los sentimientos de asombro y respeto que la figura de un Dios omnipotente guerreando con criaturas es capaz de suscitar. Me impresionaba la coincidencia de las distintas situaciones con la mía, y a menudo me identificaba con ellas…»

(8) En la investigación de Don Shelton, el pseudónimo Mrs Carver oculta a Anthony Carlisle y se construye con Mr “Car…” y “carver” que identifica a su profesión de cirujano (carver: trinchador de  carne).

(9) Las controversias sobre la moralidad de la manipulación de cadáveres fueron permanentes en Londres en aquella época, especialmente cuando vinculaban a cirujanos y anatomistas con los ladrones de cadáveres (body-snatchers) y resurreccionistas. El proceso más conocido fue el seguido contra los asesinos Burke y Hare en 1828. Este proceso llevo a la aprobación del Acta de Anatomía de 1832.

(10) El prólogo de Frankenstein de 1831 cita, con el nombre de vermicelli, esa pasta en la que se puede generar vida espontánea a la que refieren los estudios de Erasmus Darwin  (Spontaneous Vitality of Macroscopic Animals).

(11)  Las Croonian lectures on muscular motion de  Anthony Carlisle  fueron impartidas  en 1804, 1805 y 1807. Las Croonian lectures se impartían por invitación en la Royal Society y en el Royal College of Physicians (Real Sociedad y Real colegio de Medicos)

(12) El Hunterian Museum aún existe en Londres y está  adscrito al Royal College of Surgeons (Real Colegio de Cirujanos) .

(13) La casa de John Hunter, con su puerta trasera oculta al público desde la que accedía a su laboratorio, fue tomada como referencia por Robert Louis Stevenson para escribir El doctor Jekyll y misterr Hyde en 1886.

(14)  «Dios nos libre, hay un  cadáver  y es mayor que el de un gigante…». Los horrores de la Abadía de Oakendale, de Mrs. Carver.

(15) Mary Godwin  los llamó waking dreams. Y escribió: «Mis sueños fueron siempre míos, nunca se los conté a nadie, ellos fueron mi refugio».

(16) En 1814 Mary W. Shelley ya había iniciado su relación con Percy B. Shelley, aún casado, y sir Anthony Carlisle había tenido sus dos hijas fruto de su relación con su ama de llaves mientras vivía con Martha Symmons.

(17) Así calificaron a Anthony Carlisle, el dramaturgo Charles Lamb y el actor Robert W. Elliston.

(18) Don Shelton en su investigación cree probable que muchas de las modificaciones introducidas por Mary W. Shelley en la edición de 1831 respecto de la edición de 1818 pudieran tener la intención de suprimir cualquier referencia a un científico que crea la Criatura con «partes de cadáveres» y en consecuencia vincular a Anthony Carlisle con los ladrones de cadáveres pasando a poner el énfasis en la aplicación de la electricidad. El grabado incluido como primera página de la edición de 1831 se ajusta a lo expresado por Mary W Shelley en la carta “imaginada»,  grabado que tiene por tanto una implícita referencia en el retrato de sir Anthony Carlisle.

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Bibliografía consultada:

Mary Shelley. Miranda Seymour.

La edad de los prodigios: terror y belleza del romanticismo. Richard Holmers.

Mary Shelley: Her life, her fiction, her monsters. Anne Kostelanetz Mellor.

—Artificial Intelligence: Critical concepts. Edited by Ronald Chrisley.

Shelley’s Frankenstein. Graham allem.

shelleygodwinarchive.org

Anthony Carlisle and Mary Shelley-Finding Form in a Frankenstein Fog. Don Shelton.

The Monsters: Mary Shelley and the Curse of Frankenstein. Dorothy Hoobler, Thomas Hoobler.

Contra natura: Sobre la idea de crear seres humanos. Philip Balll.

John Hunter by Stephen Paget.

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Juan Mari Barasorda