La Ciudad de la lluvia, de Alfonso del Río. Espías nazis en Bilbao

Alfonso del Río nos presenta La Ciudad de la lluvia, una novela que ya ha sido considerada como el éxito editorial del año.

Espías nazis en el Bilbao de Zubizarreta

La ciudad de la lluvia no es una novela de nazis, pero está ambientada en la Alemania nazi de 1941. Tampoco es una novela de fútbol, pero también se desarrolla en el Bilbao de Zubizarreta, en 1983. No es una novela de abogados, pero contiene las memorias del mejor abogado del mundo y no creo que sea una novela sobre los poderes económicos, pero muestra detalladamente las intrigas de las élites por la presidencia de una famosa entidad bancaria.

En 1983, Alain Lara descubre una antigua fotografía en la que reconoce a su abuelo junto a Ignacio Aberasturi, un importante empresario que aspira a la presidencia del Banco del Norte, y a otras tres personas, entre ellas un niño. Las muertes de estas personas harán que Alain busque a María, heredera del imperio Aberasturi y que juntos intenten encontrar los lazos que unieron a las dos familias. Al mismo tiempo, «el mejor abogado del mundo», escondido y esperando a que lo asesinen, nos cuenta en primera persona cómo se convirtió en lo que es.

Por otro lado, como si de una película en blanco y negro se tratara, en el Berlín de los años 40 una voz en off nos cuenta cómo un personaje conocido como el Extranjero intenta engañar a la cúpula nazi.

La Ciudad de la lluvia, una novela innovadora

Las dos tramas se desarrollan en Alemania y en Bilbao y, para ello contamos con tres puntos de vista diferentes. La historia de espías, protagonizada por el enigmático espía, que utiliza un tono más intimista; la investigación de Alain y de María, que es la narración con más ritmo; y las memorias, escritas con una distinta tipografía que asemeja a la máquina de escribir, del abogado.

La fotografía es de donde todo parte, el eje central. Es una fotografía que se hace casi por casualidad y que 42 años más tarde vuelve a unir a los protagonistas, abocándolos a unas muertes tan casuales como misteriosas.

Los personajes están muy bien caracterizados, los diálogos nos describen perfectamente las personalidades de cada uno, pero lo que más nos ayuda a descubrir cómo son realmente los protagonistas son las citas que preceden a cada capítulo. Estos son diálogos ficticios que nos describen las personalidades de sus protagonistas. Algunas de estas conversaciones, que no suceden en la trama, presentan al lector la verdadera esencia de los principales personajes.

En La ciudad de la lluvia el investigador es un futbolista, Alain, algo a lo que no estamos acostumbrados. Este personaje se aleja de la imagen que actualmente tenemos de los jugadores de élite. Alain es reflexivo, quiere triunfar en el Athletic de Bilbao, pero tiene claro que para ello no va a sacrificar su felicidad. Los otros dos personajes principales, el Extranjero y el abogado, cumplen todos sus sueños, tienen mucho poder, pero, sin embargo, no alcanzan la felicidad. María es quien sirve de nexo entre todos ellos y quien protagoniza un triángulo amoroso que añade tensión a La ciudad de la lluvia.

Cuando te enfrentas a un libro con tantas y tan buenas críticas, al menos en mi caso, estoy siempre convencida de que no me va a gustar, pero en esta ocasión no ha sido así. La ciudad de la lluvia es una novela innovadora que recoge el testigo de los thrillers americanos y lo sitúa en el Bilbao de las inundaciones. No lo dejéis escapar.

La ciudad de la lluvia

Alfonso del Río
Ediciones Destino
Colección Áncora y Delfín

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Reseña de Almudena Natalías

Portada de la reseña: David de la Torre