La sonrisa de Darwin, de Anna Maria Villalonga: brillante muestra de narrativa contemporánea
La sonrisa de Darwin, de Anna Maria Villalonga: tres descensos a los infiernos y un alma pura como guía. Reseña de Rosa García Gasco.
Literatura
La sonrisa de Darwin, de Anna Maria Villalonga: tres descensos a los infiernos y un alma pura como guía. Reseña de Rosa García Gasco.
Bajo la piel del alacrán, de Paco de Paula (Cazador de ratas). Reseña de Ginés J. Vera.
Sin remilgos, de una manera directa, así es como se abarcan todos los temas relacionados con la prostitución en la obra teatral de Andrés Lima. En el Teatro Español, Prostitución, con Carmen Machi, Nathalie Poza y Carolina Yuste. Informa, Juan Carlos Galán.
El vals de los agujeros negros, una novela negra de Alexis Falkas diferente a todo lo que hayas leído hasta ahora. Reseña de Juan Infante.
Estos son algunos de los libros que podrás encontrar en librerías y plataformas digitales este mes de febrero. Un mes frío al calor de la lectura. Novedades editoriales de las que nos informa Carolina Beltrán.
Desde sus ojos, primera novela del periodista cubano Yusnel Fleites. En la Cuba rural del «Periodo Especial», una adolescente ha de buscar su destino. Reseña de Antonia María Carrascal.
Roja Caperucita, de David Llorente. Déjate atrapar en ese bosque sin árboles y contén la respiración. No te la pierdas, hasta mediados de febrero en El Umbral de Primavera (Lavapiés, Madrid). Silvia Monterrubio.
Mucha nieve, un asesinato, y una nueva entrega de la guerra de sexos entre Anne Starling y el sufrido Arthur. Muerte en los Hamptons, de Ana Bolox. Reseña de Rose Hurst.
La piedra caída del paraíso, de Abraham Aguilar. Reseña de Eva Fraile Rodríguez. La búsqueda del Santo Grial nos llevará a la Barcelona actual y a las cloacas del mercado ilegal de obras de arte.
José Luis Soto nos cuenta en esta entrevista que Delibes lo empujó a la literatura, Julio Verne lo hizo vibrar, Tolstoi lo llevó a dudar de si él mismo conocía a los personajes de sus novelas, Ken Follet le admiró con la redondez de sus finales y García Márquez con la magia de las palabras.