Para esta mi primera entrega dedicada a las mujeres escritoras y poetas en Revista MoonMagazine, mi idea era comenzar buscando material en la Edad Media o Renacimiento, pero un tesoro mucho más antiguo llamó mi atención y me sedujo su lectura. De su autora vamos a tratar en este artículo.

Se llamaba Enheduanna, nacida en el siglo XXIII a. de C. en la antigua Mesopotamia. Hija del rey Sargón I de Acad, en Sumeria, por tanto, princesa, fue también poeta y narradora, así como suma sacerdotisa en el templo levantado al dios Nanna, (la luna). Enheduanna fue la autora de la primera obra literaria de la historia, escrita, eso sí, en tablas de arcilla, halladas en la soterrada ciudad de Ur, sobre el siglo VII a. de C.

Se comentaba hasta entonces que la escritura provenía de los dioses, o al menos así lo creían. Los griegos pensaban que Prometeo se la había dado a la humanidad como un regalo. Los egipcios, que era un beneficio de Tot, el dios del conocimiento. Para los sumerios, la diosa Inanna se la había robado a Enki, el dios de la sabiduría.

Es en medio de este escenario histórico que hallamos el personaje de Enheduanna. Y la labor celestial de esta mujer de hecho se refleja en su nombre, que significa «ornamento del cielo». No es más que un epíteto poético que indica la belleza de la luna en el firmamento.

Enheduanna escribió muchas obras literarias, entre ellas dos himnos dedicados a Inanna, la diosa mesopotámica del amor. También se le adjudica la autoría del mito de Inanna y Enki cantado en varios himnos.

Las tradiciones de la escritura en el mundo antiguo son a menudo consideradas labor exclusivamente de hombres, pero la obra de Enheduanna es una parte fundamental de la historia literaria de la antigua Mesopotamia.

Que Enheduanna sea identificada como la autora de esas obras es significativo debido al anonimato que rodeaba frecuentemente las creaciones de otros autores anteriores, por tanto, desconocidos ellos y sus obras para la Humanidad.

Al parecer era muy común en aquellos tiempos que las hijas de las casas reales de la zona fueran nombradas por sus padres, los reyes, para el cargo político religioso de sumas sacerdotisas. Y en este caso Sargón la nombró y mandó a ejercer su labor en la ciudad estado de Ur, para afianzar el poder en el sur de Sumeria. Si bien al final, durante el reinado de su hermano Rimush sería expulsada de allí y posteriormente restituida de todos sus cargos.

En el libro Los hijos de los días de Eduardo Galeano se hace referencia a Enheduanna, que aquí transcribimos.

Y Enheduanna vivió en el reino donde se inventó la escritura, ahora llamado Irak, ella fue la primera escritora, la primera mujer que firmó sus palabras, y fue también la primera mujer que dictó leyes, y fue astrónoma, sabia en estrellas, y sufrió pena de exilio, y escribiendo cantó a la diosa Inanna, la luna, su protectora, y celebró la dicha de escribir, que es una fiesta, como alumbrar, dar nacimiento, concebir el mundo.

El siguiente poema es un canto a la diosa Inanna, posiblemente el de su restitución del exilio.

Oh, mi Señora
Bienamada del Cielo,
he dicho tu furia con verdad,
Ahora que su sacerdotisa 
ha regresado a su lugar,
el corazón de Inanna se restaura. 
El día es auspicioso,
la sacerdotisa está vestida
en hermosas túnicas,
en femenina belleza,
como en la luz de la ascendente luna.
Los dioses han aparecido
en sus legítimos lugares,
el umbral del cielo exclama, ¡Salve!,
alabanza a la destructora dotada de poder,
a mi Señora envuelta en belleza.
Alabanza a Inanna.

Vemos que la poesía siempre fue lo bello de la literatura. Lo que tiene conexión con lo espiritual y el amor. La poesía va más allá de la palabra y dice más de lo que refleja en la escritura, desde tiempos remotos. En ella hay una transposición de lo real a lo arcano. Es, pues, no solo una inspiración para el poeta, sino una meditación a la hora de escribir. Y esa necesidad de plasmar lo secreto viene, como vemos, desde tiempos inmemoriales.

Enheduanna, la primera poeta conocida de la Historia. Enheduanna nació en el siglo XXIII a. de C. en la antigua Mesopotamia y se le atribuye la primera obra literaria escrita en arcilla. Un artículo de José María García Plata. Share on X

José María García Plata

Este artículo incluye un enlace de venta de Amazon. ¿Nos ayudas a seguir adelante?
Todos los artículos de Revista MoonMagazine están sujetos a derechos de propiedad intelectual. Está prohibida su utilización (copias, duplicados y capturas) en cualquier medio sin el consentimiento expreso y por escrito de los autores y de la revista. Copyright MoonMagazine.info © Todos los derechos reservados.