Díaz Castro en MoonMagazine

Con Mar Beres

Con  Díaz Castro en MoonMagazine nos sumamos a los actos realizados por La Real Academia Galega en honor al poeta lucense Xosé María Díaz Castro en el Día das Letras Galegas. Lo haremos de la mano de Mar Beres, poeta nacida en Guitiriz, cuna del autor de Nimbos, un clásico de la literatura gallega del siglo XX.

En la parroquia de Os Vilares, municipio lucense de Guitiriz, todavía se mantiene en pie, resistiendo el paso del tiempo, el lugar de Os Manchás, construido siglos atrás por una familia de origen manchego, como deja traslucir su nombre, alterado fonéticamente a lo largo del tiempo. Allí nació y vivió hasta su matrimonio, la madre del poeta Xosé María Díaz Castro. Años más tarde nace en esa misma casa, en el día de la Revolución de los Claveles, una joven llamada Mar. Su infancia se desenvuelve en un ambiente campesino, naturaleza salvaje en la que también tuvieron su espacio los libros que se guardaban en aquella casa.

Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Lugar de Os Manchás. Fotografía Tarsi Canteiro.
Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Lugar de Os Manchás.
Fotografía Tarsi Canteiro.

OS MANCHÁS

Atopeime no berce
dos primeiros latexos,
unha casa baleira
de porta sen vidreira.

Un ceo inmenso
de verdes esquecidos,
un río famento
de pan do muíño.

¿Onde van os pequenos
brincando nos penedos,
onde remoe a Gallarda,
onde, o canto do carro?

As pedras de sempre
quedaron sen fala
en camiños que non andan.
Xa non se oen as zocas
da madriña nas lastras.

Os Manchás,
o pé do monte, agarda silente.

© Mar Beres

Desperté en la cuna / de los primeros latidos, una casa vacía / de puerta sin vidriera. // Un cielo inmenso / de verdes en el olvido, / un río hambriento / de pan de molino. // ¿Dónde van los niños / jugando en las peñas, / dónde rumia la Gallarda, / dónde, el canto del carro? // Las piedras de siempre / quedaron sin habla / en caminos que no andan. / Ya no se oyen las zuecas / de la madrina en las losas. // Os Manchás, / al pie del monte, espera silente.

© Mar Beres

Mar Beres es graduado social, aunque le hubiera gustado estudiar Literatura. La limitación de medios de su familia hizo que escogiera la carrera con más sentido práctico que corazón. De niña escribía poemas en hojas sueltas y un diario que guardaba entre libros, a escondidas de su madre; todavía conserva ese gesto de pudor y humildad cuando muestra su obra. En Homenaje: Díaz Castro en MoonMagazine, Mar Beres nos habla de su poesía y de la inmensa figura del poeta que la ha marcado tanto.

Frg. de *»Coma un río», poema de Díaz Castro. Foto de Tarsi Canteiro.

¿Qué piensa una poeta novel que enhebra palabras y sentimientos sobre un maestro como Xosé María Díaz Castro?

Xosé Mª Díaz Castro es EL POETA. #DíadeGalicia #Poesía Share on X

Xosé Mª Díaz Castro es EL POETA, así, en letras mayúsculas: una persona sencilla e intelectual, cuya poesía es universal e independiente del paso del tiempo. Fue una persona de carácter humilde, amante de su tierra, sus gentes y su lengua. A través de su poesía, vital, pura, y profunda como él, nos transmite las preocupaciones y el sentir del ser humano desde un punto de vista filosófico y espiritual. Para ello se inspira en el entorno rural en el que se crió, utiliza las labores del campo como metáfora para dar trascendencia a los asuntos de la vida, con esa profunda emotividad que siempre le caracterizó.
Es el poeta de la «luz», tan presente en sus poemas –«La luz del mundo es la que arde en una lágrima»-, el poeta que engrandece las pequeñas cosas llenándolas de pureza desde lo más profundo.

*Hay una cosa clara como el sol: / para nuestros ojos no está hecha la luz / del mundo, el alba fría que se abrió / cuando abrimos los ojos sobre el mundo.

Era ante todo, un hombre humilde que no se consideraba poeta, y creo que fue precisamente esa humildad lo que le llevó a ser tan grande. En Coma ventos fuxidos, el primer poema de  Nimbos, lo expresa claramente.

 Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Xosé María Díaz Castro.
Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Xosé María Díaz Castro.

Coma ventos fuxidos

Estes non son poemas, nin cimentos
de poemas siquera. Son fragmentos
de min mesmo perdidos,
coma ventos fuxidos,
por antigos camiños esquencidos:
Díaz Castro perdido no traxeito
dun recordo moi longo, recolleito
por un anxo e salvado
nalgún intre de amor desesperado!

Xosé María Díaz Castro.

 

Como vientos huídos

Estos no son poemas, ni cimientos / de poemas siquiera. Son fragmentos / de mí mismo, perdidos / como vientos huídos, / como antiguos caminos olvidados: / Díaz Castro perdido en el trayecto / de un recuerdo muy largo, y por un ángel / recogido y salvado / en un trance de amor desesperado.

He leído y releído a Díaz Castro y cada vez que lo hago, no puedo evitar la emoción, me sé estrofas e incluso algún poema entero, que a veces recito sin ton ni son en mis quehaceres cotidianos o porque alguna circunstancia me los trae a la mente. Será que su tierra es mi tierra, su gente, mi gente; será que transmitimos el mismo amor y el mismo dolor en forma de poesía: la suya, grande y lograda, la mía, aun pequeñita, escrita también con sentimiento.

 Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. "Inmovilidad". Foto de Tarsi Canteiro.
Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. «Inmovilidad».
Foto de Tarsi Canteiro.

Díaz Castro transmite una visión muy especial de la vida y de Galicia.

A este respecto, comparto totalmente el sentimiento que transmite su poema Como brasas:

«Poeta o no, yo cantaré las cosas / que en el umbral de mí están esperando / Alumbraré con antorchas de palabras, / vasta herencia mía, el mundo que me dieron. / Con este aliento, les daré a las cosas / el drama pleno que les niega el destino: / les daré rostros, para que se conozcan; / palabras les daré, para que se entiendan.

Y también comparto esa visión suya, filosófica y a la vez real de la vida y de Galicia. Esa Galicia encadenada al pasado, temerosa y de caminar lento, y que al mismo tiempo sueña con avanzar. Una situación perfectamente reflejada en su poema Penélope:

«Un paso hacia delante y otro hacia atrás, Galicia, / y la tela de tus sueños no se mueve. / En tus ojos se despereza la esperanza, / aran los bueyes y llueve. / Pero tú te envuelves en sábanas de mil años / y en sueños tornas a escuchar tu lluvia.

Penélope es el poema social gallego por excelencia, es «su poema social». Lo destacan mucho los entendidos porque refleja fielmente la realidad y problemática de Galicia, pero a través de imágenes conceptuales de gran valor poético, nunca desde el punto de vista de denuncia panfletaria.

Difícil tarea la de elegir entre tantos amores…

Es cierto, no podría elegir como preferido un solo  poema de Díaz Castro porque, al igual que no tengo un libro preferido, ni una canción, ni una película destacada -soy de plurales-, lo mismo me pasa con la poesía de este hombre: tengo, más que poemas, estrofas preferidas. Os recomiendo que leáis Nimbos, O verme i a estrela, Coma brasas, Como un anxo airado, A cerna, No resplandor do día y Como unha espada También os digo que si ahora mismo abro su poemario, seguramente os enunciaría el ochenta por ciento de sus poemas.

 Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Vista general de Os Manchás. Foto de Tarsi Canteiro.
Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Vista general de Os Manchás.
Foto de Tarsi Canteiro.

¿Qué influencias destacarías en tu poesía, Mar?

Destacaría sobre todo la forma de vida por aquel entonces en el campo, antes de que se mecanizara. Durante mi infancia todo el trabajo se realizaba de forma artesana y manual. La ayuda de la familia, los vecinos y los animales era indispensable. Ese existir, esa convivencia en armonía con el entorno, donde el factor humano cobraba más relevancia que en estos tiempos tan individualistas.
Como también he vivido en la ciudad en mi época universitaria, mi conclusión es que criarse en un ámbito natural te ayuda a despertar y desarrollar los sentidos.

Ese contacto directo con una naturaleza pura se nota en tu poesía, en las imágenes y metáforas.

Acarícianche os pés a herba / e soan as melodías / a cada paso de piano, / acompáñante as bolboretas / con acordes de guitarra.// Embriágante os arrecendos / de pétalos de rosa no aire, / desnúdaste á vida enteira /e abrázante os raios do sol / nadando danzas de amor. (Frgm. de Acordes Vitais, Mar Beres).

Te acarician los pies la hierba / y suenan las melodías / a cada paso de piano, / te acompañan las mariposas / con acordes de guitarra. // Te embriagan las fragancias / de pétalos de rosa en el aire, / te desnudas a la vida entera / y te abrazan los rayos de sol / nadando danzas de amor.
(Frgm. de Acordes Vitales, Mar Beres).

La naturaleza y la forma de vida en el campo te regala olores, sonidos, tactos, sabores e imágenes que no se encuentran en la urbe. El olor de la hierba después de llover un día de verano, el de multitud de plantas y flores, el de los animales o el del heno en el pajar. Infinidad de sonidos como el de las ranas, los grillos, el trino de los pájaros -el de la lechuza por la noche, asusta-, el canto del carro, el cencerro de las vacas, el caminar del río sobre las piedras. Sabores como el de la leche recién ordeñada, el pan recién hecho, el queso fresco de la abuela, las moras o el néctar de ciertas flores si las libas. En cuanto a imágenes, todo un mundo de verdes y azules salpicado de otros muchos colores. Igual pasa con los tactos: coge un puñado de harina recién molida en la mano y otro puñado de tierra recién arada en la otra, cierra los ojos y cuéntame… o acuéstate en un prado de hierba natural y acaríciala con las manos… agarra una mazorca de maíz sin deshojar y péinale la melena…

 
 Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Valente beleza. Poema de Mar Beres. Foto de Celso David Chaves Cuervo.
Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar BeresValente beleza. Poema de Mar Beres.
Foto de Celso David Chaves Cuervo.
Namentres

Cando pase a tronada
verase vida na morte,
follas verdes de bidueira,
auga clara dende a ponte,
ras choutando na veiga.
Bolboretas, frores e cores
ríndose das nubes mouras.
Cans, nenos e amores
axotando as pegas cochas.

Namentres,
esgallan as pólas,
fenden os raios as penas,
acédase o caldo na pota
e aterecen as xestas co frío.
Leva o aire as gargalladas,
arrinca de súpeto a boa raíz.
Auga, tronos e ventos
devastando sentimentos.

Namentres,
doenza se cadra, se cadra nada.

©Mar Beres

Cuando pase la tormenta / se verá vida en la muerte, / hojas verdes de abedul, / agua clara desde el puente, / ranas saltando en el humedal. / Mariposas, flores y colores riéndose de las nubes negras. / Perros, niños y amores / espantando las urracas. // Mientras tanto, / se resquebrajan las ramas, / atraviesan los rayos las rocas, / se agria el caldo en la olla / y tiemblan las matas de frío. / Lleva el aire las carcajadas, / arranca de cuajo la buena raíz. / Agua, truenos y vientos devastando sentimientos. // Mientras tanto, / dolor quizás, quizás nada. (Mientras tanto, ©Mar Beres).

 Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Diseño de Rosa Prat.
Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres Xosé Mº Díaz Castro.
Diseño de Rosa Prat.
O verme i a estrela

Esta sede infinita de pureza
ausoluta, esta sede de xustiza
que nos queima, esta sede de beleza…
baxo as alas de pedra de priguiza
i a paga do pecado en cada ezquina
i a erbiña sobra fóia i a ruina…

Esta sede de lus, méntrelo vento
da morte zúa darredor das cousas
que están no noso corazón, cinzento
sopro que arrinca os días, queima as chousas
máis íntimas, e bárreas coma a ágoa…!
A lus do mundo é a que arde nunha bágoa.

Esta sed infinita de pureza / absoluta, esta sed de justicia / que nos quema, esta sed de belleza… / bajo las alas de piedra de la pereza, / y el salario del pecado en cada esquina, / y la hierba sobre la sepultura, y la ruina… // Esta sed de luz, mientras el viento / de la muerte ruge en torno de las cosas / que están en nuestro corazón, soplo de ceniza / que arranca los días, quema los huertos / más íntimos y los arrasa como una riada… / La luz del mundo es la que arde en una lágrima.

El gusano y la estrella. Xosé María Díaz Castro.

 Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Dibujo digital de Rosa Prat.
Díaz Castro en MoonMagazine. Con Mar Beres. Mar Beres.
Dibujo digital de Rosa Prat.

Recordando Díaz Castro, artículo de Txaro Cárdenas y Mar Beres.

Dibujos digitales basados en fotografía de Rosa Prat.

Fotos de Tarsi Canteiro y Celso David Chaves Cuervo